¡Nunca es pronto para empezar a cuidar tu piel! Una piel joven no es cuestión sólo de edad: mantener una hidratación y nutrición correcta es fundamental para lucir un rostro firme y radiante.
Los Skinboosters pueden aplicarse sin límites de edad, y están enfocados a un público joven, para prevenir los primeros signos de envejecimiento cutáneo ya que a partir de los 25 años se pierde anualmente un 1,5% del colágeno total de la piel.
Por otro lado, también es un tratamiento estrella cuando se tiene un evento (bodas, comuniones, etc) para aportar luminosidad e hidratación y mejorar visiblemente el aspecto de la piel. Asimismo, nos ayuda a obtener mejores resultados cuando los combinamos con otras técnicas o procedimientos estéticos
La duración mínima del tratamiento es de 3 meses (demostrado en estudios clínicos la mayor síntesis de colágeno y engrosamiento de la dermis). Recomendamos 3 sesiones espaciadas de 4 semanas cada una, con ello la duración del tratamiento es de 1 año aproximadamente.
Skinbooster en un tratamiento de medicina estética que consiste en la aplicación a través de microinyecciones de un gel muy suave de ácido hialurónico (AH) estabilizado mediante la tecnología única y patentada NASHA. Este ácido hialurónico promueve la formación de colágeno e hidrata la piel en profundidad, sin aportar volumen. Mediante este tratamiento conseguimos que la piel se vea más luminosa, menos apagada, se mejoran las pequeñas marcas de acné o imperfecciones cutáneas, aumenta la elasticidad, la piel se ve más tersa y se disminuyen las pequeñas arrugas.
El protocolo habitual de Skinbooster consta de una fase de inicio de 3 tratamientos espaciados de 2 a 4 semanas cada uno y posteriormente una fase de mantenimiento cada 6 meses. Con ello se consigue que efecto dure más tiempo, aproximadamente un año. El procedimiento no es doloroso ya que el producto incorpora anestésico, tampoco es invasivo por lo que permite retomar la rutina diaria sin contratiempos. La recuperación es bastante rápida (1 o 2 horas) y la duración de la sesión es de 30 a 45 minutos dependiendo de la zona a tratar. El resultado comienza a ser visible desde el segundo día.
Es importante tener en cuenta que para alargar los resultados obtenidos con los Skinboosters se empleen hábitos alimentarios equilibrados, con una correcta hidratación, que se evite la exposición solar de las zonas tratadas sin la debida protección y sobre todo evitar el consumo de tóxicos como el tabaco y alcohol.